La fabricación de un tablero alistonado implica varias etapas que van desde la selección de la materia prima hasta el acabado final. En este post Maderterraneo te describe el proceso general para la elaboración de un tablero alistonado:

 

Selección de la Materia Prima:

El proceso comienza con la selección de la madera adecuada. Se eligen tablas de madera maciza de calidad, generalmente de especies de madera dura como iroko, roble o haya vaporizada. La madera debe estar bien secada para garantizar estabilidad y durabilidad.

 

Corte y Alistonado:

Las tablas de madera se cortan en tiras más estrechas y se alistan, es decir, se les da forma plana y uniforme. Este proceso se realiza utilizando máquinas especializadas, como sierras y cepilladoras, para obtener tiras de madera con dimensiones y espesores precisos.

 

Encolado y Prensado:

Una vez que las tiras de madera alistonadas están listas, se les aplica un tipo de pegamento especializado diseñado para madera en las superficies que se unirán. Estas tiras se organizan de acuerdo con un patrón específico, a menudo intercalando las fibras de la madera para mejorar la resistencia y estabilidad del tablero. Después, se prensan juntas con fuerza. La presión aplicada durante este proceso asegura que las tiras se adhieran perfectamente entre sí, formando un panel sólido y fuerte.

 

Secado y Curado:

Después del encolado, los paneles se colocan en áreas de secado controlado para eliminar la humedad residual y permitir que el adhesivo se cure completamente. Este proceso es esencial para garantizar la estabilidad dimensional del tablero.

 

Corte a Medida:

Una vez que los paneles están secos, se cortan a las dimensiones deseadas para formar el tablero alistonado. Esto implica cortar el tablero en su ancho y largo final según las especificaciones del producto final.

 

Acabado:

Después del corte, los tableros alistonados pasan por un proceso de acabado. Esto puede incluir el lijado para suavizar las superficies y eliminar imperfecciones, así como la aplicación de acabados protectores como barnices o aceites para la protección contra la humedad y el desgaste.

 

Inspección y Calidad:

Antes de ser empaquetados y distribuidos, los tableros alistonados pasan por un proceso de inspección de calidad para garantizar que cumplan con los estándares establecidos. Se verifican dimensiones, acabados y otros criterios de calidad para asegurar que cada tablero cumpla con las expectativas.

 

Una vez completadas estas etapas, los tableros alistonados están listos para su distribución y uso en una variedad de aplicaciones, como revestimientos de paredes, suelos, muebles y otros proyectos de carpintería.